Cuando se tiene apenas catorce abriles, las preocupaciones constituyen una leve caricia de viento en los desbordados espíritus juveniles. Los errores abundan, la templanza comienza a forjarse de a pocos y se empieza a vivir a un ritmo propio y personal. En esta situación se encuentra el tímido Manuel (o «Manongo»), quien vive con sus padres en una apacible ciudad del norte, ambientada en la década de los 80’s. Todo transcurre con normalidad hasta que descubre misteriosamente una carta que aparece dentro de su cama.
El remitente responde al nombre «M.». Manuel extrañado lee y relee la carta. Todo se le hace muy raro pues no es posible que quien la haya escrito sepa tantas cosas personales, incluso, la que únicamente sabe él: su gusto por Laura. En una segunda misiva se devela su autor y descubre con sorpresa que es su «yo» (dentro de treinta y cinco años), lo que da inicio a que se entable una especie de correspondencia entre ambos. En tanto que ocurre eso, Manuel vive su día a día, golpeado por acontecimientos funestos, aunque con el auxilio de estos consejos más que oportunos. En esto consiste el quid de la novela: ¿Qué le dirías a tu propio «yo» si tuvieras la posibilidad de escribirte (a esa versión tuya más inexperta e ingenua ante la vida)?
La novela recorre el camino inverso de El Principito, de Antoine de Saint-Exupery. Mientras que por un lado, el aviador francés de la segunda guerra mundial escribe un hermoso manuscrito acerca de las cosas que perdemos en el proceso –inevitable– de volvernos adultos (mirar siempre desde el prejuicio, buscar lo material, dejar de soñar, etc.); por otro lado, Gustavo Rodríguez hace lo propio, preparando a Manongo –y por extensión, también a los lectores– en el complicado proceso de llegar a adultos, empleando para ello, un tono cálido, dulce y sencillo (pero no por ello menos elegante).
Te escribí mañana destila ternura, empatía, honestidad y giros inesperados; toda una caja de sorpresas. Con toda certeza, las inseguridades, frustraciones y sentimientos de Manuel también son los nuestros (o lo han sido en algún momento).
RODRÍGUEZ, Gustavo, [2016]: Te escribí mañana. Lima: Ediciones SM.
La Pluma de Luder 